Por una resolución, la AFIP avala ahora que las propinas sean pagadas a través de tarjetas de crédito y débito. En ese contexto, Iván Ortega, dijo "s simple vista parece bueno, facilita al cliente el tema de dar la propina. Pero me parece que no puedo ser tan simplista e ingenuo. Y a partir de allí me surge una serie de interrogantes. Por ejemplo, el empleado debe esperar en tiempo y forma que se haga la acreditación a la cuenta del empresario".
"Hay impuestos y gravámenes a tener en cuenta. A veces la propina supera el sueldo. En Brasil y en Francia nadie deja propina, porque ya está por ley regulado. Allí si hay una deducción simple. Pero también es injusto a la vez" explica.
"En nuestro local, el 20% de lo que se levanta de propinas, se deja para los que trabajan en la cocina. Entre los camareros y los cocineros los sueldos suelen ser similares" comenta Ortega.
Finalmente, afirma que "el posadeño es un poco "pijotero". Ni siquiera eligen el postre, dejan de lado lo dulce. Y no todos dejan el 20% de propina".